Con el mismo orgullo que le vale alzar un campeonato ganado en las ligas menores, este lunes el joven de Alajuelense Kenyell Mitchell se llevó un título que puede ser el más importante para su vida por las puertas que le abre: el del bachillerato del colegio.
Emocionado y reconociendo lo que significa el momento, el limonense, de 18 años, dio unas emotivas palabras al recibir su diploma y enfundado con la cinta de graduación del colegio Calasanz Nocturno, con el que los erizos lograron realizar un convenio para que estudien sus cachorros.
Mitchell es uno de los muchachos que vive en el Centro de Alto Rendimiento (CAR), estudia desde allí de manera virtual y al igual que cuatro de sus compañeros, recibieron el título de Bachi. A ellos se les suman 19 chicos que recibieron su título de noveno.
En un acto muy emotivo, acompañados de sus papás y directivos del colegio y de Alajuelense, se recibió la primera generación de graduados del CAR, la cual ven como el punto de partida a grandes planes para los muchachos, más allá de lo que pase en la cancha.
Para nosotros el CAR va más allá si la ⚽️ pegó en el palo y entró... o salió. Sin dudas nos complace ver a nuestros futbolistas superarse y seguirse desarrollando como personas, al mismo tiempo que luchan por su sueño de convertirse en jugadores de Primera División de Liga Deportiva Alajuelense. 👏🏻 ¡¡Felicidades a los cachorros primera generación graduados gracias a nuestra alianza con el Ciudad Hogar Calasanz!! 🎓
Posted by Liga Deportiva Alajuelense on Wednesday, December 21, 2022
“Cuando yo llegué a la Liga, (mediados del 2021) me dijeron que estaba el colegio, pero yo no me podía pasar todavía porque estaba en virtual (en el Colegio Deportivo de Limón), pero para este año ya me pasé. En el CAR nos dicen que el estudio es muy importante y por eso no lo descuidamos”, dijo Kenyell.
El muchacho es el ejemplo del jugador que le han ido dando minutos, incluso, en el primer equipo, debutó contra Pérez Zeledón en el Apertura 2022, al tiempo que estaba en las aulas poniéndole con los exámenes de Mate, su materia favorita, y sacando buenas notas que lo hicieron primer promedio de su clase, según nos dijo.
“Es algo que siempre quise, desde que estaba en Limón una de mis metas era estudiar, sacar el bachillerato y estar en el primer equipo entrenando lo hace más especial. Como fui el primer promedio además estaban muy orgullosos de mí.
“Los compañeros del primer equipo todavía me siguen felicitando, me preguntan qué quiero estudiar (Administración de Empresas) y que la universidad también es muy importante por lo que siga estudiando”, nos contó.
Doryan Rodríguez, Emmanuel Salazar y Johnny Sala García son los otros tres cachorros que sacaron el bachi junto a Kenyell.
Por su lado, en noveno, muchachos como Jensel Aguilar, o Edmilson Etoo Guevara son dos de los que ya completaron la educación general básica.
“Para mí es muy importante estudiar, porque si mi carrera se acabara a corta edad, tengo los estudios para buscar un trabajo. Fue muy bonito, mi familia se sintió orgullosa de mí porque ya me estaba graduando de noveno”, destacó.
Un resumen de la ceremonia fue publicado en un video difundido en las redes sociales del club.
Más que un título
Lanzo Luconi, directivo de Alajuelense que acompañó a los muchachos en el proceso estudiantil y estuvo en la graduación, nos dijo que esto lo emociona más que ganar cualquier campeonato, pues les están dando herramientas a los muchachos para defenderse ante la vida.
“Fue como un sueño cuando iniciamos hace casi ya año y medio con la planificación de lograr un acuerdo con una institución como el Colegio Calasanz para darles un contenido más integral a la formación de los muchachos.
“Más que formar jugadores de fútbol, queremos formar ciudadanos de bien, que tengan claro que su papel en la sociedad no es solo ser referentes del fútbol, sino que sean un ejemplo de costarricenses de bien y la educación es un pilar en eso, basada en valores como los que aprende”, dijo a La Teja.
El proceso además fue seguido muy de cerca por el presidente manudo Joseph Joseph, para quien es vital que los muchachos estén estudiando, por lo que como parte de sus tareas en el CAR, el estudio es otra de las obligaciones que deben cumplir.
“Tener a los primeros graduados del programa, pero que además estén comprometidos a continuar aprendiendo, con sus estudios, ya sea terminando el colegio o yendo a la universidad y dar el ejemplo de que sí se puede combinar la dedicación prioritaria al deporte con la formación académica”, dijo Luconi.
El directivo nos contó que los muchachos más que verlo como una obligación, son muy aplicados y voluntariosos porque saben la gran oportunidad que es que el club les dé el estudio.
“Yo estoy feliz, fijate que para mí esto vale más que un campeonato, porque hemos logrado dar un primer paso con una primera graduación de muchas que van a venir, en donde nos estamos asegurando que los muchachos tendrán la oportunidad que no tendrán antes.
“Luego vendrán otros retos, queremos ir incorporando a las muchachas a estos programas, que el proceso del fútbol femenino tarde o temprano se dará y debemos estar preparados para ese momento poder ampliarlo y además queremos hacer alianzas con universidades para que sigan sus estudios”, agregó Luconi.
De esta manera el CAR más allá de ser una “fabrica de jugadores” busca ser una escuela de personas preparadas para enfrentar los retos de la vida más allá de una cancha de fútbol.