Cuatro años después de llorar por su ausencia en la Copa del Mundo de Brasil 2014, el lateral Bryan Oviedo disfruta montones su segunda oportunidad de ser mundialista.
Van dos días de entrenamientos en el Complejo Fedefútbol-Plycem en San Rafael de Alajuela y Oviedo no se cambia por nadie, por fin está a las puertas de jugar un Mundial.
El 10 de mayo de 2014, el propio jugador anunció que no pudo completar a tiempo la recuperación de una lesión de tibia y peroné que sufrió desde el 24 de enero de ese mismo año, durante un partido de la FA Cup contra el Stevenage. En aquel entonces defendía la camiseta del Everton inglés.
Hoy, con 28 años y defendiendo al Sunderland también en Inglaterra, Oviedo le está poniendo bonito para llegar con todo a Rusia.
"Lo estoy viviendo con muchísima ilusión, para mí es muy importante estar acá y disfrutar el día a día, es un sueño hecho realidad estar acá, poder prepararme y trabajar para el Mundial", aseguró Bryan este miércoles por la mañana, justo antes del entrenamiento.
Contrario a años anteriores, esta temporada Oviedo registra 2.665 minutos jugados en la competición regular y un par de partidos más de Copa.
"En mi club gracias a Dios me fue muy bien, jugué muchos partidos, tuve buen rendimiento y para mí eso es muy importante. Sentirme bien y saber que no hay ninguna molestia física me ayuda a trabajar y prepararme todavía mejor para el Mundial", comentó el lateral izquierdo.
"Para mí es el mejor momento que he tenido en mi carrera porque tenía muchos años de no tener una temporada tan regular, en la parte física y futbolística me ha ayudado muchísimo, llego en mi mejor momento y espero demostrarlo", agregó.
Con respecto a su club, el Sunderland que descendió a la tercera división inglesa, el costarricense asegura que aún tiene dos años de contrato. Eso sí, ahora no se estresa porque solo quiere pensar en la Sele y después verá.
El defensor indicó que no hay ninguna cláusula que le permita salir del equipo ahora que bajó de categoría, además, él y su familia están felices en esa ciudad.
Finalmente, Bryan dice que está entrenando con todo, no tiene miedo de recaer o sufrir ninguna otra lesión.
"Ya estoy acá y aquí hay que dar lo mejor de nosotros, no vale el hecho de cuidarse, porque si te cuidas tal vez no llegas al mundial al 100 por ciento. No fue una espera larga, con mi familia tratamos de vivir el día a día, lo que pasó fue difícil, pero fue en el pasado y lo más importante es que tengo otra nueva oportunidad", señaló.