Aficionados del juego entre Santa Ana FC y Club Sport Herediano resultaron afectados por los gases lacrimógenos que lanzaron las autoridades para controlar a los miembros de las barras de ambos clubes, que armaron un pleito.
La situación sucedió al minuto 50, por lo que el central Adrián Chinchilla tuvo que parar el juego al notar que los miembros de las barras se lanzaron piedras de un sector a otro del estadio de Piedades.
La Fuerza Pública y la Policía Municipal de Santa Ana intervinieron para controlar la situación, y para tratar de bajar la intensidad de los barristas, lanzaron gases lacrimógenos, pero esto generó otro problema, pues muchos aficionados que no tenían relación con la bronca, resultaron afectados.
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Niños, mujeres y hasta adultos mayores presentaron problemas en su garganta y sus ojos durante varios minutos por el gas. Incluso, un miembro de Repretel, la productora del partido, abandonó el estadio afectado.
La mejenga se reanudó al minuto 58 luego que las autoridades detuvieran a los que provocaron el hecho.