Víctor Núñez tiró crítica sobre Saprissa por la que Allan Alemán brincó y se armó el pleito

Víctor “Mambo” Núñez y Allan Alemán volvieron a tener un rudo enfrentamiento en el programa La Platea, el cual tuvo hasta tintes personales, luego de que el segundo se diera por aludido por los comentarios de su compañero.

Resulta que Mambo estaba tirándole duro a algunos jugadores del Monstruo que para él no tienen nivel ni merecen estar en el club, en ningún momento dijo nombres, pero sí señaló que hay gente a la que no le da la cuerda.

Allí es cuando brincó Alemán, a quien no le gusta que le toquen al equipo y hasta le recriminó al asistente florense “si es que tiene algo contra Saprissa”.

“Usted sí habla feo, mae, usted habla tan feo, habla mucha papaya y con el hígado. ¿Yo no sé qué le hizo Saprissa a usted que solo tira con el hígado? Siempre le tirás duro a Saprissa, pero no analizás, no pensás”, le tiró.

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Mambo le cuestionaba qué cuál era el hígado y si lo que le molesta a él es que le toquen a Saprissa o los jugadores y en un momento le tiró otra en la que el exmorado si se puso como un miura.

“Usted siempre defiende. ¿A quién es que quiere defender en Saprissa?”, le tiró, a lo que Allan replicó: “Diay a Saprissa”, a lo que Víctor le soltó: “Mmmm ya veo” y ahí es donde se alzó la bronca y Alemán se dio fuertemente aludido.

“No, no, si dice a mi hijo, también lo defiendo, porque siempre me tirás, siempre es una picazón, siempre tirás lo mismo y ya estoy harto, espérese, el día que yo le mencione algo de sus hijas, no se enoje, se lo estoy diciendo, ya te lo he dicho”, dijo.

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Christian Sandoval y Carlos Castro fueron los otros dos implicados en el pique, el periodista respaldó al Mambo porque este no dijo nombres y era solo una crítica, y Carlitos ni chistó, se quedó callado y haciendo unas caras de Dios libre meterse en esa broncas.

“Pero Mambo no está diciendo nombres, no está mencionando a nadie”, le decía Sandoval tratando de tranquilizar el tema a lo que Allan respondía: “No, no, yo no soy tonto”.

Al final Alemancito, como le llamó el Mambo, siguió defendiendo y peleando por un equipo que para él es intocable.