El Atlético y el Real Madrid disputarán este domingo la final de la Supercopa de España con tintes de revancha en la ciudad saudí de Yedá, ya que los colchoneros vencieron a los merengues en la final del 2014.
Lo curioso de esta mejenga, es que será la primera vez no estarán presentes ni el campeón de Liga ni el de Copa del Rey.
El nuevo formato de Supercopa, inaugurado este año en Arabia, llevó a cuatro equipos españoles a ese país y ni el Barcelona, campeón de la pasada Liga, ni el Valencia, ganador de la Copa del Rey, pudieron ganarse el derecho a disputar el cetro.
El equipo blanco llegó a Yedá como semifinalista de Copa con mejor historial, ocupando la plaza que debería haber tenido el Barça como finalista, pero que ya tenía su puesto como campeón liguero.
"A nosotros nos beneficia este año (el formato) porque antes la jugaban el campeón de Liga y de Copa, y somos, entre comillas, unos invitados", reconoció en rueda de prensa, el capitán del Real Madrid, Sergio Ramos.
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Sabor a revancha
El Real Madrid, el segundo equipo que más veces ha ganado la Supercopa, buscará en Arabia la revancha de 2014 contra el Atlético de Madrid.
En aquella ocasión, a doble partido, el Atlético se impuso 1-0 en la vuelta, tras un empate 1-1 en la ida.
El Real Madrid tratará este domingo (al mediodía, hora tica), en el estadio King Abdullah de hacer olvidar aquella derrota alzando su undécima Supercopa de España.
“Es un partido importante porque detrás hay un trofeo”, aseguró este sábado el técnico blanco, Zinedine Zidane.
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El equipo blanco dejó una buena impresión el miércoles venciendo al Valencia 3-1 con la alineación de cinco centrocampistas que le dio un gran resultado.
El equipo merengue apenas notó las sensibles ausencias de última hora por una lesión muscular de su goleador Karim Benzema y de Gareth Bale, que "sufrió una infección en el tracto respiratorio superior".
Ganar el primer título de 2020 sería un impulso más para el equipo merengue, que comparte liderato liguero con el Barça y que parece haber dejado definitivamente atrás la mala temporada pasada.
Pero, no lo tendrá fácil ante un Atlético animado por la épica victoria ante el Barça del jueves, al que remontó en apenas cinco minutos un 2-1 en contra para ganar 3-2.
"Apareció algo que tiene y siempre tendrá el Atlético: el corazón, la garra", aseguraba Simeone tras el partido.
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El técnico argentino tiene la oportunidad de repetir su victoria de 2014, en la que la cruz fue su expulsión en el partido de vuelta de aquella final.
Sancionado con ocho encuentros de suspensión por dar golpecitos en la nuca al cuarto árbitro, el técnico argentino pudo estar el jueves en el banquillo tras cumplir su castigo.
En el caso de Zinedine Zidane, querrá llevar a su cuenta persona el título número 10, para quedar a solo cuatro de los 14 de Miguel Muñoz, el más ganador en casa merengue.