Al llegar a Catar la Sele se topó con dos rivales que le están dando guerra, pero que con disciplina y siguiendo las indicaciones al pie de la letra vencerán esos primeros obstáculos, hablamos del calor y el sueño.
La selección nacional superó su primera noche en Catar, en donde jugará la próxima semana el juego de repechaje ante Nueva Zelanda y el preparador físico de la mayor, Erick Sánchez reveló que están monitoreando el sueño de los jugadores, esperando que el proceso de aclimatación sea exitoso, ya que al cruzar el charco y estar al otro lado del mundo se les cambió el horario.
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“Los jugadores conciliaron el sueño a eso de la medianoche (martes) y eso lo monitoreamos con sensores, para medir la calidad del sueño y si empezamos a notar que dos días después les está costando el horario, echamos mano a otras medidas, con el médico y el jugador, porque lo que queremos es que duerman bien y hagan rápido el cambio de horario”, explicó Sánchez.
Todos puras tejas.
— El preparador físico comentó que los juegos ante Panamá y Martinica no dejaron lesionados.
Desayunan tarde
El experto contó que el sensor no es invasivo y mide varias cosas, como la variabilidad cardiaca, el sueño profundo, el sueño ligero y al final del día emite un reporte de cómo han dormido los jugadores.
Además, contó que los seleccionados están desayunando a eso de las 11:30 de la mañana, hora en Catar,
“Estamos entrenando a esa hora (9 p.m.), de pronto todo comenzará mas tarde, los jugadores irán conciliando el sueño a eso de la 1 a.m. se despiertan pasadas las 10 a.m.”, aseguró.
El otro rival que está dando guerra es el calor, las temperaturas durante el día sobrepasan los 40 grados y andar en la calle es insoportable, por eso es que la Sele entrena de noche.
“El equipo solo pasa en el hotel, la idea es no tener problemas de calor, no queremos que salgan para que no experimenten con las altas temperaturas.
“Tratamos de que si los jugadores están en aire condicionado hacer esos traslados del bus al estadio rápido para que no sientan el golpe de calor”, explicó.
El preparador físico rescató el trabajo del técnico Luis Fernando Suárez en la parte anímica, porque en su criterio todo el mundo se siente bien, los más experimentados apoyan a los más jóvenes.
“Será un partido de vida o muerte, pero es difícil que un equipo se caiga en un solo partido, aparte de que tenemos cinco cambios y la parte emotiva ayudará para que lo físico no se caiga. El profesor ha sido un maestro en manejar al grupo, la parte anímica está al tope”, dijo.