Andy Reyes, delantero de Saprissa, le adelantó a su familia, horas antes del partido contra Alajuelense, que el clásico sería su gran momento.

El atacante salió titular ante Alajuelense y para cumplir con la promesa que le hizo a sus seres queridos, corrió, buscó el balón y hasta anotó el segundo tanto de la mejenga.

Reyes rompió la maldición que lo perseguía desde hacía un año, tiempo que tenía de no anotar y lo volvió a hacer cuando más sabe: contra el archirrival.

A los 39 minutos del juego, que estaba más que pasado por agua en el Nacional, Andy aprovechó una bola que quedó suelta en los linderos del área y la prendió de derecha, la pecosa pegó en la pierna de Ian Smith y, para su fortuna, el desvío hizo que el balón bañara a un Leo Moreira que nada pudo hacer.

La celebración del pepino, del chamaco de 23 años, hizo eco desde la Joya de La Sabana hasta San Miguel de Naranjo, el pueblo alajuelense que vio nacer y crecer a Reyes y desde allá, sus papás don Julio y doña Rosa y su hermana Natalia, lo celebraron con todo.

“Él no nos dice si está agüevado por las críticas, pero sabemos que quiere anotar, él está ansioso y creo que esas ansias se lo estaban comiendo”. Julio Reyes, papá Andy Reyes.

Don Julio conversó con La Teja y dice que el miércoles, antes del partido, su hijo le adelantó que algo bueno sucedería en la noche.

“Él nos llamó a eso de las tres de la tarde y se escuchaba muy emocionado cuando nos dijo que sería titular. Nos alegramos, por supuesto, por la oportunidad que le estaban dando, yo le pedí que lo disfrutara y él me dijo: ‘Pa, va a ser mi noche y eso me dará continuidad’”, destacó.

El orgulloso tata reconoció que su muchacho ha sido blanco de críticas, pero ellos le han recomendado bañarse en aceite para que le resbalen y pueda dar lo mejor en la cancha.

Lágrimas de alegría

Los papás y la hermana de Andy se tiraron el partido en la casa y estaban felices porque lo vieron muy motivado en el duelo contra los leones.

Al momento del gol, don Julio y doña Rosa se abrazaron y se quedaron viendo la repetición.

“Me quede viendo a mi esposa, a ella se le salieron las lágrimas. Él ha sido criticado por aficionados y periodistas, pero en esto, como en la vida, hay rachas buenas y malas, Andy no ha sido regular y por eso esperamos que agarre vuelo, él está joven, sé que si le dan más partidos, podrá aumentar su nivel.

“Yo le digo a él que no vea tantas redes, porque eso lo puede afectar emocionalmente, él tenía varias semanas de no jugar y sé que es una racha negativa, pero confío en que este sea el inicio de cosas buenas”, manifestó.

El señor dice que el tanto lo hizo, incluso, devolverse en el tiempo.

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“Me hizo recordar sus inicios cuando tenía diez años y nos íbamos en bus al Proyecto Gol. Dios lo ha bendecido y él es feliz”.

Andy conversó con sus papás hasta este jueves temprano, ya que ellos no quisieron molestarlo luego del partido.

“Él está muy feliz por el gol, siente confianza en que todo puede ser mejor y nos dijo que cuando vio la bola adentro no sabía qué hacer, sintió muchas cosas al mismo tiempo.

“Es el primer jugador sanmigueleño que juega un clásico y que anota y es lo más bonito, los vecinos nos felicitaron, la gente está contenta”, dijo el papá, que trabaja en una finca cafetalera.

También le preguntamos a don Julio qué opinaba de que el extécnico morado, Iñaki Alonso, felicitara a su hijo en Twitter.

“Andy tenía una buena relación con él y nos alegra que el entrenador le haya reconocido su esfuerzo, las críticas y bromas han sido parte de la misma sequía, pero él quiere crecer, ya sea que juegue diez minutos o todo un partido”.