El exárbitro y analista Greivin Porras calificó el trabajo de Juan Gabriel Calderón en el primer tiempo del clásico nacional y considera que le ha faltado fuerza y ha sido permisivo con los jugadores.
Para el exréferi Saprissa debería haber terminado la etapa inicial con tres expulsados, Ariel Rodríguez, quien considera que la roja es justificada, el defensor Pablo Arboine por un codazo a Freddy Góndola y el entrenador Jeaustin Campos porque no ha se ha quedado quieto en el partido.
“El árbitro debe aprovechar momentos importantes para amarrar el partido e imponer su autoridad y la acción recién iniciado el partido de Celso Borges no es para hablar, eso es tarjeta amarilla y punto, al no hacerlo empezamos a ver un partido muy friccionado por lo suave que fue con Celso.
“Es un partido que hasta se tornó violento, porque los jugadores entendieron que esas faltas que hizo Celso no se iban a sancionar y los jugadores asumen una actitud diferente en el juego”, dijo.
Para Porras la roja a Ariel es lo que cambia el rumbo del partido en la sanción, con lo que trató de nuevo acomodarse en el partido Calderón, sin embargo considera que le faltó dos rojas.
“Hubo codazos que eran de tarjeta roja, perdonó a Arboine y de las famosas directrices de la comisión de arbitraje, que son de mentirillas, se habla que no se permiten las protestas de entrenadores y la forma que lo ha hecho Jeaustin Campos no puede ser posible que se esté dando”, añadió.
Esta nota llega cortesía de Ferretería Brenes