Cada vez que el banquillo erizo empieza a cojear, el nombre de Óscar Ramírez aparece de forma automática como el candidato ideal para la mayoría de aficionados.
La situación con el Machillo es bien conocida, las prioridades del hombre hace un tiempo están lejos de las canchas, pues está enfocado en sus negocios y su finca en Hojancha.
Uno que conoce de cerca la situación del entrenador es Ángel San Casimiro, obispo emérito de Alajuela, amigo y consejero de muchos años. Él nos reveló qué haría falta para que Ramírez vuelva a dirigir después de dos años alejado del fútbol.
“Eso está un poquito incierto, en estos momentos la mente de Óscar está en Guanacaste, en su finca y con todo esto de la pandemia le está dando prioridad a lo que le está dando de comer.
“No es porque lo conozco, pero sé que tiene la cabeza muy clara y que su norte es fortalecer la finca, aunque el día de mañana podría tener un administrador en el que cual confíe plenamente y deje en sus manos esa situación para que vuelva al fútbol. Yo sí espero y tengo la seguridad de que va a volver, ¿adónde?, eso no puedo decirlo porque no lo sé”, comentó.
El sacerdote está acostumbrado a que la gente le pida que hable con el Machillo para que vuelva a la Liga, aunque él es muy respetuoso pues se trata de una decisión personal.
“Yo creo que Óscar es un buen técnico, aunque a algunos no les gusta, pero quienes le sucedieron no hicieron nada mejor que él, más bien empeoró. Aunque él haya hecho un paréntesis, no quiere decir que no esté estudiando el fútbol nacional, eso le gusta mucho hacerlo.
“A mí no extraña que él día de mañana le pase la fiebrecita que tiene y agarre un equipo, ojalá que sea la Liga y de verdad venga con ideas más frescas, porque cada quien desarrolla un estilo de juego de acuerdo a la materia con la que cuenta”, explicó.