Alex López y Leonel Moreira le dan la victoria a Alajuelense con un golazo y un paradón

Alex López y Leonel Moreira llevaron a Alajuelense a los cuartos de final de la Copa Centroamericana con acciones que bien valen un triunfo muy pellejeado, al puro cierre del encuentro salvaron la tanda para ganar de manera agónica 1-0 al Sporting Miguelito en Panamá.

Todo pasó en el cierre, de San Miguelito podíamos decir muy poquito, prácticamente ni inquietó a Leonel Moreira hasta los 88 minutos cuando Osito se jaló la tapada del partido con un tiró a quemarropa que sacó a mano cambiada y que en la transmisión de ESPN fue definida como la atajada de la copa. Algo que el meta manudo viene haciendo con mucha frecuencia.

Tres minutos después, apareció López, quien había entrado de cambio y con un pepino desde afuera del área logró lo que no habían podido hacer sus compañeros en toda la mejenga, en la última el León pudo pegar el zarpazo y traerse la clasificación de tierras canaleras. Cómo le costó.

El León mandaba señales confusas, el viernes fue un equipo contundente que goleó 3-0 a San Carlos, que creó muchas jugadas de peligro y este jueves otros cien pesos totalmente. Llama la atención la diferencia tan marcada entre un día y otro. ¿Pesan tanto algunas ausencias?

Cuando uno vio la alineación que tiró Carevic se topó algunas sorpresas, como la de dejar en banca a Joel Campbell por ejemplo, quien entró hasta los 63 minutos por Carlos Mora.

No todos podrán jugar siempre, pero Joel es un jugador que la gente quiere ver siempre, o la ausencia de Michael Barrantes, quien apenas con unas mejengas en la Liga, ya pesa cuando no está.

Salvó los últimos 15 minutos del primer tiempo, el León no creó el fútbol que uno debe esperar y exigir de un equipo como la Liga.

Fueron tres jugadas que eran para que alguna hubiera entrado, tres protagonistas que erraron frente a marco, ya sea por protagonismo del portero José Guerra o por no acomodarse para tirar.

Primero. Carlos Mora a los 33. Le filtraron un pase en el que quedó mano a mano con el meta, pero su remate no fue tan preciso, se lo tapó el meta e hizo que la pecosa perdiera potencia y en el rebote el mismo Mora tratando de meterla, más bien la echó afuera.

Segundo. Giancarlo González a los 41. Un cabezazo de frente por el lado derecho, fue un centro en el que Pipo entró sin marcas tras una buena jugada preparada de táctica fija, pero esta vez Guerra estaba bien ubicado y la sacó de muy buena manera.

Tercero. Johan Venegas a los 42. Otro centro al primer palo, esta vez entró el Cachetón, estaba frente a marco, pero no logró bajar la chocobola y la envió sobre el el arco.

Los manudos insistían en el cierre del primer tiempo, demostraban el hambre por ganar, pero al segundo tiempo, entre un jueguito de pases insulso que no deparaba resultado alguno y la falta de claridad, ya las jugadas no eran claras.

La Liga pisaba el área contraria, pero cuando no se tiene certeza o claridad para hacer algo, eso no vale de nada y los manudos empezaban a desinflarse sin que los cambios aportaran algo muy diferente.

De lo poquito por resaltar antes de las jugadas que marcaron la mejenga, fue un centro de Campbell que le quedó a Joshua Navarro, pero le mandó un derechazo al techo del Rommel.

¿Los manudos habrán dado el perillazo como los morados este miércoles por lo que veían? Quién sabe, al rato algunos lo hicieron y no podemos culparlos, pero esta vez se perdieron como su equipo salvó una mejenga que parecía iba para los mismísimos libros del aburrimiento.