Lo de Alajuelense en Concacaf ya no es mala suerte, es un verdadero calvario.
Diez años sin ganar una sola serie en la Copa de Campeones, el torneo más importante del área, una década de intentos fallidos, eliminaciones prematuras y decepciones que se repiten una y otra vez.
La última vez que la Liga logró avanzar en ese certamen fue en la temporada 2014-15, cuando llegó a semifinales. Desde entonces, cada intento termina en la misma historia: eliminación temprana.
Ahora, con la herida fresca de otra eliminación internacional, tras caer ante Pumas de México, Alajuelense debe cambiar el chip rápidamente, porque el torneo nacional no da tregua.
Este domingo, los manudos enfrentan al Cartaginés, a las 11 de al mañana en el Fello Meza, en un partido clave por la lucha en los primeros lugares de la tabla.
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La afición exige respuestas y la presión sobre Alexandre Guimaraes aumenta, porque si bien la Liga sigue en zona de clasificación, el equipo no ha mostrado solidez. ¿Será capaz Alajuelense de sacudirse el golpe de Concacaf o el Cartaginés aprovechará el mal momento?
¿Incapacidad o mala racha?
En esta década, la Liga ha vivido de todo. Seis veces ni siquiera clasificó a la Copa de Campeones de la Concacaf, en otras cuatro quedó fuera en la primera serie disputada y, aunque en dos ocasiones llegó como campeón centroamericano, tampoco logró romper la mala racha.
Su última serie ganada fue en el 2015, cuando eliminaron al DC United con un global de 6-4, tras golear 5-2 en el Morera Soto y caer 2-1 en Estados Unidos. En semifinales, el Impact Montreal los dejó fuera por gol de visitante, luego de perder 2-0 en Canadá y ganar 4-2 en casa.
Después de ese torneo, la historia ha sido la misma. En la 2020-21, el Atlanta United los eliminó con doble 1-0. En la 2022-23, el Galaxy les pasó por encima con un 3-0 en la ida y aunque ganaron 2-1 en casa, no les alcanzó.
En la 2023-24, el New England Revolution los sacó con un global de 5-1, tras golearlos 4-0 en Estados Unidos y empatar 1-1 en la vuelta.
Y en este 2024-25, Pumas se encargó de mantener la maldición, imponiéndose 2-0 en México y empatando 1-1 en Alajuela.
De aquella eliminatoria ante el CD United, “sobrevive” un jugador, Rónald Matarrita.
El papá del lateral, del mismo nombre, recuerda bien la Liga de esos años y explicó a La Teja lo que él cree que está pasando.
Don Rónald Matarrita recuerda bien a aquel León que competía de tú a tú y cree que hoy el fútbol ha cambiado, pero también la mentalidad de los jugadores.
“Antes se jugaba con amor y cariño a la camiseta, eran jugadores más baratos, pero daban el corazón. Ahora, hay jugadores que vienen con mayor costo, pero a veces no se nota la diferencia en entrega”, comenta con nostalgia.
Añadió que la diferencia de nivel entre la Liga MX, la MLS y la tica es abismal y afirmó que sigue siendo liguista por apoyar a su hijo, pero está defraudado del equipo. “El mismo Alexandre Guimaraes está como enamorado de algunos jugadores”, manifestó. “Yo estoy muy defraudado de la Liga, y le digo algo, el fútbol de Costa Rica es mediocre”, afirmó.
Son ya diez años y ni una sola serie superada en el principal torneo de Concacaf. El Morera Soto sigue esperando que se rompa la sequía. ¿Será en el próximo intento? Para saber eso habrá que esperar, pero lo más cercano es ver si este domingo, en el Fello, los manudos empezarán a lavarse la cara o los aficionados sufrirán un poco más.