Ahora que los bloqueos son pan de cada día, Carmelita se propuso montar una barricada en el estadio Rafael Bolaños para frenar el buen paso de Saprissa.
Y lo logró porque al Monstruo se le perdió la cadenita cuando más duele, en la saprihora y el líder del campeonato se tuvo que conformar con el empate 2-2 después de ir arriba en el marcador 2-0.
Al Monstruo le pasó lo mismo que a muchos ticos que cuando creen que lograron capearse los bloqueos se toparon la presa y justo cuando iban llegando, cuando da más cólera y no hay nada qué hacer.
Casualidad o no, algo tiene Alajuela que ha frenado a los morados este semestre, todos los puntos que han perdido en el torneo han sido en esa provincia, empató 2-2 ante San Carlos en la fecha dos, perdió 1-0 ante Alajuelense en la jornada 7 y ahora tropezaron contra los carmelos. En Alajuela sumaron dos de nueve puntos posibles.
Durante la primera parte los morados lucían con la suficiente fuerza y fútbol para pasarle por encima a cualquier manifestación, los locales ni con Albino Vargas de capitán detendrían el buen toque entre Mariano Torres y Christian Bolaños.
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Rápido llegó la recompensa para el Monstruo y su buen pasabola, a los 16 minutos un jugadón de primera intención entre Bolaños y Torres acabó con pase filtrado al área que definió de gran manera Ricardo Blanco. Para beneficio del espectáculo el gol no agüevó a los locales ni tampoco conformó a los visitantes.
Carmelita llegaba al área de Kevin Briceño, pero sin mucha claridad y para colmo de males, Juan Gabriel se tragó una clara falta de penal del argentino Alejandro Cabral.
Cierre de infarto
Para el segundo tiempo, la buena propuesta de ambos siguió, aunque el cuadro de la barriada manuda tocaba mejor la pecosa y ya llegaba con más peligro al área de Briceño, mientras que los morados empezaron a ensayar disparos de larga distancia con muy poca efectividad.
Al minuto 72 cayó lo que parecía la sentencia para Carmelita, otra vez apareció Torres quien pegó un centro pasado, Bola le hizo vista al balón y cuando iba cayendo le metió un derechazo, nada pudo hacer el portero local, Bryan Rodríguez.
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La afición morada empezó a pedir el ingreso de Tassio Maia, el brasileño que a puro gol se ganó a la afición, entró a los 74 por Jairo Arrieta, pero esta vez no andaba el traje de salvador, el que parece lo usa de manera exclusiva en Tibás.
En solo 13 minutos los verdolagas recuperaron la ilusión y lograron bloquear el paso arrollador de Saprissa.
Primero Jorge Gutiérrez clavó un pepino de tiro libre al ángulo derecho que pasó por encima de la barrera, imposible para Briceño.
Y en el último minuto los verdolagas le recetaron al Monstruo una dosis de su propia medicina y marcaron el gol del empate en la famosa saprihora.
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Jonathan Martínez mandó un centro al área donde apareció Carlos Montenegro sin marca para empatar las acciones, lo que frenó en seco a los tibaseños que cedieron dos puntos en la lucha por la cima. Algo tiene Alajuela que a los morados no les gusta