Esta semana el ADO Den Haag vivió un momento alocado durante la práctica previa a un nuevo compromiso por la Eredivisie, cuando un grupo de ultras se metió en el centro de entrenamiento y le dio una charla técnica al plantel para “corregir errores” del entrenador.
El director técnico, Alan Pardew, estaba dialogando con sus dirigidos cuando cerca de 15 aficionados lo callaron y tomaron las riendas del entrenamiento.
Fue así que, según informaron medios locales, los futbolistas se vieron obligados a escuchar las indicaciones de los fans. La imagen fue publicada por el usuario de Twitter HHooligan, muy popular en Holanda por visualizar este tipo de casos.
Tal como informó Football Orange, el incidente no pasó a mayores ya que el cuerpo técnico no se resistió y escuchó atentamente las correcciones que hicieron los líderes de la afición. Lo más curioso es que fueron ellos los que llevaron una pizarra para explicar las estrategias de juego.
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El equipo no levanta cabeza y se encuentra penúltimo en la primera división holandesa, en zona de descenso, a seis puntos de distancia de los puestos de salvación.
El entrenador, Alan Pardew, asumió en diciembre y debutó en enero con un triunfo, pero en los últimos cinco encuentros apenas cosechó dos puntos, debido a los empates 2 a 2 ante el Heerenveen y 0-0 frente al Vitesse. En la temporada, el club apenas suma cuatro victorias en 24 presentaciones y 18 derrotas, ha convertido apenas 25 goles y recibido 50.
En conferencia de prensa, Pardew se había defendido de las críticas por sus planteos tácticos.
“Fui contratado para salvar al equipo del descenso y estoy tratando de hacerlo. En todo, sistemas, formaciones, tratamos de encontrar el equilibrio adecuado para el equipo”.
Pardew ha dirigido muchos años en Inglaterra, a clubes como el Newcastle United, West Ham United, Crystal Palace y Southampton, entre otros y es conocido por su capacidad para solucionar los problemas de los equipos que pelean por no descender.
Incluso, al debutar en el ADO Den Haag, los ultras colgaron una bandera gigante con su rostro y el logo de los Cazafantasmas, ilusionados con que su llegada les daría la salvación.