Rándall Chiqui Brenes se despidió entre aplausos y elogios, el ídolo brumosos tuvo su último partido con la camiseta blanca con los 30 minutos que jugó ante el Rosario Central de Argentina este domingo.
Momentos antes de salir el Chiqui pateó un tiro libre que casi se mete al marco del argentino Josué Ayala, pero con muy buenos reflejos sacó la pecosa, el casi gol fue el detonante para que empezaran los reclamos sobre el técnico Paulo Wanchope.
"¿Diay no que Chiqui ya no jugaba?, Chope salite vos y dejá a Chiqui, Fuera Chope, Cuidado Chope que ahí viene Pinto, vea Chope, aprenda quién es Chiqui", son entre otros de los gritos publicables de los fiebres.
El torneo ni ha empezado y es claro que la relación entre la afición y el técnico está rota, en la lucha entre el ídolo y un entrenador, quedó más que claro que ladó tomaron los fiebres.
El resultado de 2-1 con los goles de Marco Rubén y Fernando Zampredi y el descuento de Néstor Monge para los centenarios fue lo de menos, la gente vino a ver a Chiqui, lástima que duró poquito, apenas media hora
Cuando Chiqui salió se abrazó con todos sus compañeros y eso sí desde el banquillo no lo alzaron ni a ver, Chope se quedó bien sentado y no le dijo ni adiós de lejitos.
La afición se fue agradecida con Chiqui y su legado, pero muy dolida con su técnico, a quién se lo dejó saber y le costará mucho recuperarlos, es la principal tarea de Chope en este momento.