Un aficionado del Saprissa no tuvo problema en deshacerse de una camisa del equipo de sus amores para intercambiarla por la nueva piel del Sporting.
El fiebre, quien pidió llamarse Morado Tuitero, formó parte de una campaña del club albinegro, con la cual buscan acercar a más aficionados al equipo josefino, que está dando la pelea por meterse en los primeros lugares del grupo A.
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“Siempre he sido morado, no soy envenenado, sino que veo el deporte como algo que me gusta, siempre busco algo que sea llamativo, y siempre he dicho que uno debe estar abierto a opciones y no cerrarse a una sola idea.
“Vi en la cuenta de Twitter del Sporting si alguien quería intercambiar la camisa y a mí me gusta coleccionar camisetas y siempre que he tenido la posibilidad de tener una nueva pienso ¿por qué desaprovechar la opoturnidad”, dijo este joven vecino de Cartago.
Para este fanático, el jugador más destacado en el equipo josefino es Randall Azofeifa y le dolió que en su momento no volviera a Saprissa.
Entusiasmado
El saprissista contó que de Sporting le gusta el trabajo que vienen haciendo en redes sociales y lo que están trabajando en la parte técnica para avanzar a la siguiente fase del torneo. En este momento, los albinegros se ubican en la tercera posición del grupo A, con 15 puntos y este sábado jugarán contra Alajuelense, a las y 6 p.m., los manudos tienen dos puntos más, por lo que el partido promete.
“Me gustó el diseño de la camisa, está muy bonita. Cuando la vi en foto no me convenció mucho, pero ya teniéndola al frente es otra cosa.
De colección. Sporting tiene a la venta su nueva camisa en blanco o negro. La prenda cuesta ¢13.995 y si la desea personalizar con el nombre y número le sale en ¢16.995.
Se puede comprar escribiendo al WhatsApp 6115-0101 y se retira en las oficinas centrales de Sporting FC, ubicadas en Escazú, Torre Lexus, piso 4 o en el estadio Ernesto Rohrmoser en Pavas. También se envían por medio de Correos de Costa Rica.
“Yo di una camisa de Saprissa y no me dolió entregarla. Hace años fui a Cuba y llevé varias cosas del país, creo que si uno tiene la oportunidad de cambiar algo lo puede hacer, más allá del valor sentimental”, agregó.
El aficionado contó que la camisa que cambió se la había comprado hace poco y la usaba para mejenguear y hacer deporte.
La camisa del cuadro josefina se une a una colección de chemas que tiene este fiebre.
En la colección figuran camisas de Saprissa, Cartaginés, ahora Sporting y de clubes internacionales como Real Betis, Barcelona, Manchester United, Borussia Dortmund y las selecciones de Costa Rica, Rusia y Colombia. Pero jamás tendrá una camisa de Alajuelense.
“Hace unos años visité el estadio Ernesto Rohrmoser y vi las condiciones en las que está y admiro mucho la gestión de la dirigencia.
“Eso ayuda al crecimiento del fútbol en el país”, manifestó.