Un aficionado inglés que se grabó mientras realizaba insultos racistas contra los futbolistas ingleses Marcus Rashford, Jadon Sancho y Bukayo Saka luego de la final perdida por su país en la Eurocopa-2020 ante Italia, fue condenado este miércoles a diez semanas (dos meses y medio) de prisión en Londres.
Jonathan Best, de 52 años, publicó en su página de Facebook un video de 18 segundos en el que lanzaba una serie de ataques contra los tres jugadores, que habían fallado sus lanzamientos en la ronda de penales contra Italia (3-2 en la tanda a favor de los italianos luego de un empate 1-1).
El acusado se declaró culpable y el tribunal de Willesden (noroeste de Londres) le condenó por haber “hecho público en una red de comunicación un mensaje o un contenido extremadamente insultante”.
El juez Denis Brennan explicó que había contemplado en un primer momento que la pena quedara en suspenso, pero luego decidió que fuera un castigo con cumplimiento en firme para disuadir a otras personas de hacer lo mismo en el futuro.
“Las palabras que ha empleado eran soeces, infames e insultantes, atacan la misma naturaleza de nuestra sociedad civilizada”, estimó el magistrado en su veredicto.
El video de Best fue denunciado a Facebook y a la policía por un colega y por un contacto en la red social, después de que se negara a borrar el video y estuviera tres días hasta que Facebook lo eliminó por su propia cuenta.
“Es mi perfil, hago lo que quiero”, les respondió Best, según la fiscal Elaine Cousins.
Rashford, Sancho y Saka habían recibido una avalancha de mensajes racistas en las redes sociales después de la final del 11 de julio en Wembley, en la que Inglaterra había dejado pasar la oportunidad de ganar su primer gran título desde el Mundial 1966.
Múltiples voces, incluido el primer ministro británico, condenaron los insultos racistas sufridos por los tres ingleses que fallaron sus penales en la tanda definitiva, todos ellos jugadores de raza negra.
“Formo parte de un deporte en el que leo cosas sobre mí, ya sea por el color de piel, por dónde crecí, o por cómo decido pasar mi tiempo fuera del campo. Puedo aceptar críticas de mi juego, mi actuación no fue del todo buena, debí haber acertado, pero nunca me disculparé por ser quien soy y por venir de dónde vengo”, escribió Rashford en una carta luego del incidente.