La leyenda del fútbol Diego Maradona “a veces se resistía” a ser atendido por médicos, dijo una de sus hermanas en el juicio a siete profesionales de la salud por su muerte en Argentina en noviembre de 2020.
Claudia, Ana y Rita, tres de las hermanas de Maradona, que son querellantes en la causa, declararon en la cuarta semana del juicio que tiene lugar en San Isidro, un suburbio al norte de Buenos Aires, donde murió el exfutbolista.
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Claudia, de 53 años y la menor de las cinco hermanas de Maradona, dijo que Diego “a veces se resistía” a ser atendido por médicos y que “era de carácter fuerte”.
Ella y Ana, de 74 años, coincidieron en que su hermano “hacía lo que él quería”.
Maradona falleció por un edema pulmonar generado por una insuficiencia cardíaca el 25 de noviembre de 2020 mientras cursaba una internación domiciliaria (recibía atención médica y cuidados en su propio domicilio) posterior a una neurocirugía.
Las hermanas dijeron que participaron en reuniones con médicos y con las hijas en las que se evaluó hacer la internación domiciliaria y Claudia señaló que los especialistas les habían dicho que “iba a haber médicos clínicos” y equipamiento para atenderlo.
“Dalma nos dijo ‘ustedes no tienen nada que ver, somos tres mujeres grandes y nosotras nos vamos a encargar de la salud de mi papá‘. (...) Creíamos que se iban a hacer cargo de si lo atendían, las ambulancias, los médicos y la aparatología”, declaró.
Marca Maradona
Ana contó que vio por última vez a su hermano junto con Rita cuando estaba internado en la Clínica Olivos, semanas antes de su fallecimiento, y que cuando le consultó cómo estaba, él le respondió: “Me duele el alma”.
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El abogado de Cosachov, Vadim Muschanchuk, dijo a la AFP al término de la audiencia que las declaraciones de las hermanas fueron “coherentes con lo que expresaron durante la investigación preparatoria”.
Una de ellas, sin embargo, señaló que Maradona “era hipertenso” y que Alfredo Cahe, médico de cabecera del ídolo entre 1978 y 2009, le había prescrito medicación cardíaca.
El abogado de las hermanas de Maradona, Pablo Jurado, objetó algunas de las preguntas de otros querellantes que apuntaban a las relaciones contractuales entre el exfutbolista y sus hermanas.
Para Jurado, las respuestas podían afectar los intereses de sus representadas en otra causa, en la que los hijos de Maradona demandan a sus tías por los derechos de la “marca Maradona”.
El tribunal no hizo lugar a las protestas y las hermanas tuvieron que responder al respecto.
Siete profesionales de la salud (médicos, enfermeros, la psiquiatra y un psicólogo) son acusados de homicidio con dolo eventual, una figura que implica que eran conscientes de que su accionar podía ocasionar la muerte. Una octava acusada -enfermera- será juzgada en un proceso separado.