A Reantony Steve Solís Rojas lo asesinaron de ocho balazos este sábado, a eso de las 5:10 a. m., en el condominio Concasa, en San Rafael de Alajuela.
De acuerdo con las autoridades, Solís llegó a buscar a su expareja sentimental (una mujer de apellido Crespi) en un BMW al condominio.
El hombre tocó la puerta, le abrieron y de inmediato un sujeto le empezó a disparar. El asesino agarró el carro en el que llegó Solís y se dio a la fuga.
El hombre, de 34 años, recibió los disparos en la cabeza, el pecho, las piernas y los brazos. Cayó sin vida sobre la calle principal del lujoso residencial y frente a la casa de la expareja.
El ahora fallecido era soltero, padre de dos menores y oriundo de Alajuela.
El OIJ maneja la versión de que Crespi, al parecer, salió este viernes en la noche con otro sujeto, por lo que Solís llegó este sábado temprano a reclamarle. Al parecer, las cosas se salieron de control y el otro sujeto le disparó sin piedad.
Para los investigadores también pudo tratarse de una trampa contra Reantony, a quien habrían citado en el apartamento para que lo asesinaran.
Otra hipótesis es que la muerte se debe a un pleito por drogas, pero esta última no tiene mucho peso para los investigadores.
El hombre que falleció era reconocido policialmente por las autoridades, porque tenía antecedentes por ventas de droga, portación ilegal de arma, agresión con arma y tentativa de homicidio.
Sospechoso trató de quemar carro
Crespi le dijo al OIJ no tener mucho detalle sobre el responsable del crimen. El sujeto se mantiene en fuga. Sin embargo, trascendió que la noche de este viernes la vieron en el Casino Fiesta de Alajuela y, en apariencia, ahí comenzó el problema que terminó en muerte.
Mientras las autoridades realizaban las investigaciones del crimen, los bomberos de Alajuela recibieron, a las 8:38 a. m. de este sábado, el reporte de un carro abandonado que se estaba incendiando. Eso fue un kilómetro antes de llegar al cruce de Manolos, sobre una calle paralela a la autopista Bernardo Soto, en Alajuela.
El carro quedó a las órdenes de los agentes judiciales, quienes tratan de dar con otras evidencias y con el sospechoso.