EscucharSi usted es de los que se estaciona en cualquier lado o maneja como si fuera un artista de "Rápidos y furiosos", será mejor que se pellizque, porque ya empezó a regir la reforma a la ley de Tránsito.
Desde este lunes los tráficos están en todas para hacer multas, aunque el chofer no esté en el carro. O sea, ya no vale eso del "porta mí".
El infractor podría encontrarse una boleta en el parabrisas, o llevarse la sorpresa cuando pague el marchamo de que se le hizo un parte impersonal (es decir, en su ausencia) por cometer faltas a la ley de Tránsito.
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También se multará a los conductores que se nieguen a hacer la prueba de espiración de aire para determinar si la persona conduce tamarindeada.
Quien se ponga rejego para la prueba de alcohol se le impondrá una multa de ¢306.850,21 y acumulará 6 puntos en la licencia. La cosa no queda ahí, porque estará obligado a llevar un curso de sensibilización y reeducación vial, el cual deberá ganar con una nota de 80, como mínimo. La licencia se le renovaría por 4 y no cada 6).
Los partes con cámaras también volverán a ser el dolor de cabeza para quienes les gusta majar el acelerador, sin respetar la velocidad máxima.
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El caos vial por -carros que están obstaculizando algún carril podría tener remedio. La gente afectada por esos "atravesados" podrá llamar al 9-1-1 y solicitar la presencia policial.
