Un perrito demostró ser todo un gatazo el martes 30 de mayo, cuando su dueña se fue desde Puriscal hasta la estación de Riteve, en El Coyol de Alajuela, con él metido entre el motor y la caja de dirección de su Suzuki todo terreno y salió intacto.
El curioso hecho se presentó a las cinco de la tarde, mientras la dueña del vehículo, cuyo nombre desconocemos realizaba la inspección anual en dicha estación, ya estaban en el último paso cuando Donald Enríquez, inspector a cargo observó algo negro en el centro del carro y fijarse bien, vio que era un perro.
"Vi un perro con la lengua afuera, sonriéndome, me hizo gracia. Se veía muy bien. Lo que hice fue salir de la fosa y hablar con la cliente, pedirle que se bajara del carro y me abriera la tapa del motor, como se quedó extrañada, le conté lo que estaba pasando", explicó Enriquez.
"Usted no me lo va a creer, pero hay un perro ahí abajo. De inmediato me preguntó si era negro y cuando le dije que sí, se soltó a llorar", continuó el trabajador.
Según le explicó la mujer a Enríquez, el perrito estaba enfermo y ella no se lo quiso traer por eso, pero el bandido peludito se las ingenió para irse con su dueña.
"La muchacha quedó impresionada casi que en estado de shock. Yo traté de sacarlo, pero estaba tan bien agarrado que tuve que pulsearla. Otro compañero me ayudó y entre ambos lo sacamos, con tan buena suerte que entre los clientes había un veterinario que lo revisó y confirmó que estaba en excelentes condiciones, solo un poquillo caliente por el motor, pero muy calmado", agregó el joven héroe.
Rescate quedó registrado
El feliz momento quedó registrado en video, gracias a Yerly Amaya, una vecina de El Roble de Alajuela que se tiró todo el rescate y como estaba en todas, empezó a grabar.
"Llegué a las cinco de la tarde porque tenía la cita para las 5:15, tenía dos carros delante mío y empecé a ver que abrían todo el carro y la muchacha se tocaba la frente, como desesperada y estaba llorando. El muchacho que la atendía se metió debajo del carro por lo que empecé a grabar lo que pasaba", comentó la improvisada reportera.
Luego, cuando le tocó su turno aprovechó para preguntar y le contaron que la muchacha venía desde Puris y que el perrito era suyo.
"Me contó incluso que otras veces han encontrado culebras y hasta un gato en el motor. Al final tuvo un final feliz y no un trauma por encontrarlo muerto. Incluso pensé en ese momento, que si la muchacha no lo quería, yo me lo dejaba", recordó Amaya.
Enríquez admitió que en el año y medio que tiene de trabajar en Riteve, esta es la segunda vez que se encuentra un animalito en los carros. El primero fue un gato hace como dos meses.
Aunque no supimos cómo se llama el perrito, en el video se aprecia que tiene un tamaño considerable, según los testigos, mide unos 40 centímetros o incluso lo comparan con el tamaño de un cocker spaniel Se veía bien pochotón y es un lindo zaguatico que quedó más que comprobado que cuenta con más vidas que un gato.
Un caso similar ocurrió el 11 de marzo del 2016 en Phoenix, Arizona, Estados Unidos cuando un oficial de la policía local se encontró escondido bajo su patrulla a un perrito que huía para no ser llevado a la perrera.