Una tarde lluviosa, una camita caliente y ver una película entrepiernados, generalmente termina en mucho intercambio de cariño para la modelo Shirley Barrios, para quien un buen aguacero no se puede desaprovechar durmiendo porque es el momento ideal para la pasión.
La modelo reconoce que cuando la lluvia llega busca el calorcito de su amorzote Christopher, su pareja desde hace siete años y quien siempre encuentra las mejores fórmulas para mantener la llama encendida y si alguien piensa que la lluvia apaga el fuego, en el caso de Shir y Cris es todo lo contrario.
“El frío, las cobijas, la camita, quedarse en la casa y un tremendo aguacero, claro que motiva el amor, se vuelve uno más cariñosito y entre caricias se enciende la pasión. Como uno sabe que estamos en invierno, también motiva esos momentos, irse a una cabaña en la montaña para disfrutar con buena pasión cada aguacero, para mi sí, la lluvia ayuda al amor de pareja”, nos comentó Shir.
Shirley asegura que cuando comienza a llover, ella se pone en modo relax, alista un par de copas de vino y se acurruca con su pareja, algo que no le sucede en un día de mucho calor.
“Es que el sonidito de la lluvia en el techo le sirve a uno para meterse en un viaje, que en mi caso puede terminar con un disfrute total del amor entre dos personas que se aman”, agregó.
¿Será que Shir y Cris están mal? ¿Son unos bichos raros? No. Para nada. Así es la respuesta del sexologo y fundador del Instituto Costarricense de Sexología, el doctor Mauro Fernández, quien confirma que una tarde lluviosa aumenta las posibilidades de que las parejas se pongan romanticonas.
“Por supuesto que la lluvia motiva el amor. Un aguacero nos hace quedarnos en casa y entonces el frío, el sonido del agua y las caricias terminan con una buena tarde de sexo, sobre todo en parejas que todavía no tienen hijos, es un hecho que el invierno activa la sexualidad”, indicó Fernández.
La mezcla de lluvia y frío es algo que desde siempre, según el doctor, ha provocado que el ser humano busque el calor en otra persona, ni siquiera el haber descubierto el fuego provocó que las personas dejaran de dormir juntas para mantenerse calentitos.
“Estoy convencido que cuando comienzan los aguaceros en todo el país, también comienzan cientos de parejas a tener sexo porque el estar acurrucaditos y hacerse un puño, poco a poco va despertando la pasión y rapidito llegan las relaciones y eso es bueno, porque las parejas se demuestran su amor en un clima ideal”, agregó el doc.
Aprovechando el invierno
El pasado 5 de marzo, un mes antes del inicio del invierno, se casó Gonín (Esteban Gómez), cantante nacional y con poquitos días de casado nos comentó que es totalmente cierto que la lluvia motiva el cariñito.
Si bien junto a su esposa Maureen Ramírez la pulsea todo el día en su productora Kasa Tika, haciendo videos para las propias canciones de Gonin y para otros artistas, cuando la lluvia llega, hacen una pausa porque también llega la pasión.
“Es que el sonidito de la lluvia es especial y con la lluvia llega el frío y bueno eso motiva a pasar una buena tarde con la esposa, igual si comienza a llover en la noche, la verdad que sí, un buen aguacero motiva el amor”, confirmó Gonín.
La modelo Roxy Rojas tiene tres años de luna de miel con su pareja, Kevin Ramírez, y también nos aseguró que una tarde de lluvia alegra el amor y motiva a pasar en pareja, relajaditos y ¿por qué no?, dándose cariño.
“Es un hecho que con la lluvia el romanticismo crece, no sé como explicarlo, pero la lluvia tiene ese efecto especial de motivar las hormonas, entonces uno comienza con cariñitos, después caricias y termina todo en una buena sesión de amor”, dijo Roxy.
El doctor Mauro también explicó que las parejas disfrutan más un buen aguacero que una persona sola.
“Es que ver llover no es tan bonito solo, porque uno siempre va a buscar ese calorcito del ser amado. Si existe algo afrodisíaco es la lluvia, no es algo de ahora, desde siempre ha sido así”, afirmó Fernández.
Hollywood y la pasión
La lluvia y la pasión van de la mano, sobre todo de este lado del mundo donde somos tan influenciados por la gran maquinaria del cine mundial, Hollywood, que tiene más de 100 años de hacer películas en las cuales el amor pasional se disfruta mucho más bajo un buen aguacero.
Los mejores besos en las pelis siempre se los pegan bajo un buen aguacero, las escenas sobran, por ejemplo en "El Diario de una pasión" o hasta el Hombre Araña se apercolló a su enamorada bajo un buen baldazo. En el cine un aprete sin lluvia no es aprete.
Además, según la revista especializada en sexualidad Salud y Mujer, que se distribuye en Latinoamérica y Estados Unidos, el tipo de sexo que la lluvia motiva es muy romántico, es de velitas y copa de vino, jamás motiva un encuentro salvaje y agresivo, es algo que va más por la pasión y el romanticismo, porque el sonido de un aguacero en las paredes nos pone sensibles.