La "fuerza roja" de Tiquicia denunció ayer que Uber entró como Pedro por su casa en el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) porque, sostienen los taxistas, al esposo de una de las jefas le bajaron las placas por andar “ubereando” con un carro que está a nombre de esa jefa del Cosevi.
Unos 50 taxistas oficiales estacionaron ayer sus naves en las afueras del Ministerio Público y a eso de las 3 de la tarde entregaron un documento dirigido al fiscal general, Jorge Chavarría, en el cual denuncian la situación. La Teja pudo comprobar que la funcionaria mencionada es la jefa de la Unidad de Materiales del Cosevi.
Gilbert Ureña, del Foro Nacional de Taxistas, explicó que la fuerza roja se alertó por lo que ellos consideran “una grave situación”. Se dieron cuenta por una nota de Noticias Repretel el viernes pasado, a las 7 de la noche, en la cual se evidenciaba que un vehículo fue detenido por oficiales de Tránsito por ser un uber.
“Hemos logrado comprobar que la dueña de ese carro al que le bajaron las placas es una importante funcionaria del Cosevi, una jefa, y que quien andaba ubereando era el esposo. Eso es peligroso y muy grave, por eso lo estamos denunciando, queremos la intervención inmediata del Cosevi por parte del Ministerio Público”, dijo Ureña.
Los taxistas oficiales no se quedaron queditos y lograron demostrar que el pasado 5 de abril, a eso de las 8 de la noche, al auto de la jefa del Cosevi le hicieron un parte de ¢103 mil por prestar servicio informal de transporte público.
“Aquí hay algo demasiado grave y es que Tránsito nos jura a los taxistas oficiales que en el 2016 se realizaron seis mil partes a taxistas informales, pero eso no se nota en las calles, si hubiese seis mil piratas menos estaríamos felices, pero no es así", dijo Ureña.
“El asunto se vuelve más delicado cuando se entiende que los partes elaborados por la Policía de Tránsito no son cobrados, por el contrario, son archivados en el Cosevi y nos comentan que muchos jamás se cobran porque prescriben justo en el Cosevi”, afirmó Ureña.
Cosevi investiga
Cindy Coto, directora del Cosevi, nos confirmó ayer que tras informarse de la situación por la noticia de Repretel y recolectar documentación, ayer se ordenó comenzar una investigación.
“Necesitamos entender qué sucedió, saber si la funcionaria violentó alguna normativa del Cosevi con respecto a la ética; además, en el tema de las placas bajadas, investigar si algún funcionario del departamento de servicio al usuario también quebrantó alguna ley”, afirmó Coto.
La directora ha tomado el caso por los cuernos porque asegura que serán superclaros en no permitir quebrantos éticos a las funciones que se desarrollan en el Cosevi.
“Si logramos comprobar que hubo quebranto de las leyes, someteremos a las sanciones correspondientes no solo a la funcionaria que mencionan los taxistas sino a todos los que comprobemos que no cumplieron como se debe con sus deberes de funcionarios públicos”, dijo Coto.