Aunque en teoría no le gusta la Navidad, al menos al personaje con que se despidió de la pista, Víctor Carvajal ya tuvo su primer regalo.
El presentador de De boca en boca se coronó campeón de la cuarta temporada de Dancing with the stars y recibió un trofeo como premio al buen brete hecho.
En su penúltima presentación, el oriundo de Sarchí se vistió como el Grinch, bicho que odia la época navideña, y dejó claro porqué él era el que más méritos hizo para quedar en el primer puesto junto con Diana de la O.
“Muchísimas gracias a todos, a la familia de Teletica. Felicito a todos los compañeros y este trofeo va dedicado al pueblo, a la gente que la pulsea para salir adelante", dijo Carvajal.
El sarchiceño nunca dejó dudas de que estaba entre los favoritos para ser el ganador. La mezcla de baile con apoyo del público es una receta más que infalible, el carisma y la humildad sazonaron más el asunto.
La última meneada que se pegó fue un merengue que repitió de una de las galas pasadas, la pieza que bailó fue "Soy un hombre divertido", de Wilfrido Vargas, canción que describió al dedillo lo que hizo en estos 12 programas de competencia, donde entretuvo a muchos con sus locuras.
En cuarto lugar quedó Daniel Carvajal, el tercero puesto fue para Sophia Rodríguez, Fitzgerald Haney dio batalla hasta el puritico final y se dejó el segundo lugar.
Carvajal sigue el mismo camino de Alex Costa, Renzo Rímolo y Daniel Vargas, quienes ya saben lo que es levantar el brillante trofeo.
Rándall volvió lleno de vida
La noche contó con el emotivo regreso del presentador Rándall Vargas, quien luego de superar una trombosis, volvió para adueñarse del espacio que le corresponde y que el programa pasado fue ocupado por Édgar Silva.
“Los milagros existen, soy testigo de cadenas de oración y por eso para mí ahora la palabra gracias tiene un nuevo significado. Estoy muy emocionado y agradecido por poder ver nuevamente la luz roja de la cámara y compartir con todos ustedes”, dijo.
Aseguró que ya se encuentra mucho mejor y aunque sigue en tratamiento, espera poder seguir haciendo lo que más le cuadra y hace tan bien. Ahora, por lo menos tendrá un descanso de tantos meneos.
Aún no se sabe si habrá una quinta temporada, lo cierto es que durante esta, Rándall estuvo tanteando a varias de las estrellas invitadas ( Viviana Calderón, Mauricio Hoffman) para ver si se apuntarían en caso de que la pista vuelva a encenderse el otro año.