EscucharEl camarógrafo Franklin Quesada, conocido popularmente como "Viejillo" entre los pasillos de canal 7, se volvió el más popular de la cuarta gala de "Tu cara me suena" por lo gran vineada que se pegó minutos antes de que la cantante Melissa Mora subiera al escenario.
El presentador del programa, Édgar Murillo, subió a Facebook un selfi con Meli y captó a "Viejillo" con los ojos retorcidos viendo la retaguardia de la modelo.
Murillo mencionó que todo se trató de un vacilón pues él le pidió a Quesada que se metiera en las fotos que se tomaría con cada uno de los participantes.
"Cuando tomamos la de Meli hizo esa cara improvisada jodiendo la vida y quedó tan graciosa que había que subirla", comentó el presentador también conocido como Guita.
Melissa no se dio cuenta del gesto del camarógrafo hasta que ayer vio el meme que empezó a circular en las redes sociales.
"Solo me tomé una foto con Guita. Me hizo mucha gracias cuando la vi, no me molestó la verdad, ni me sentí acosada, fue como por vacilón siento yo. ¿Y qué importa que se haya dado un taquito de ojo?", manifestó la participante, quien la noche del domingo interpretó a Paulina Rubio.
"Ha sido toda una locura"
Conversamos con "Viejillo", quien tiene 17 años de bretear en el departamento de Producción de Teletica y nos confesó que en lugar de la doña la que le hizo un berrinche fue una de sus hijas al ver la publicación.
–¿Cómo se dio lo de la foto?
Estábamos grabando la parte donde ellos (los participantes) se suben al transformador y Édgar siempre se toma un selfi con ellos. Por bromear, un día me le metí atrás, fue en una foto nada más. Después Édgar llegó y me dijo que me metiera en todas las fotos, pero que le hiciera diferentes caras entonces empecé a meterme en cada foto.
Cuando nos tocó Melissa le dije a Édgar que iba a mandar la mirada para abajo y que iba a pelar los ojos, como uno en esto debe cuidarse y lo hicimos.
–¿Y cómo le ha ido hoy (ayer) una vez que se hizo viral?
El teléfono de la doña y de la casa no paraba de sonar. Ha sido toda una locura.
–¿Qué le han dicho?
De todo. Desde viejo verde hasta que tengo una mirada de sádico. Fue todo por el vacilón.
Mi esposa (Ana Graciela Gutiérrez) me dijo anoche (el domingo): 'Vea el montón de mensajes que han mandado sus hermanos vacilando' y luego me dijo que me metiera al carro con una cobija para tomarme una foto y decirles que me tenía durmiendo en el carro. Me tomó la foto bien cobijado y se las mandó y se siguió con el vacilón.
–Es decir, su esposa ni se le enojó.
No, para nada. Ella es muy madura y sabe que era parte del vacilón. Nosotros tenemos 14 años de casados.
La que sí se enojó fue mi segunda hija, Karina, esa era la que estaba como un toro. De hecho me mandaba mensajes y me mandó: 'Franklin, lo estoy llamando a la casa, Contésteme. A mí no me hace gracia'. Ni papá me puso y todavía está brava.
De mis cuatro hijas jamás me imaginé que ella, que tiene 23 años y está casada, me celara tanto.
–¿Ya conversó con Melissa Mora sobre la foto?
No, no la he visto. Hasta después de Semana Santa nos vemos. No creo que me diga nada porque Melissa es un ser humano muy especial. Yo le digo a mi esposa que ella es una bella persona.
