Durante la mayoría de las galas de "Dancing with the stars", el exembajador de Estados Unidos, Fitzgerald Haney, estuvo entre las últimas posiciones debido a las bajas calificaciones que recibía por parte de los jueces.
Sin embargo, en el penúltimo programa, "Mr. Fitz", como le dicen sus compañeros, dejó a todos con la boca abierta al pasar directo a la final de la cuarta temporada de la competencia de baile de salón.
El exdiplomático tendrá que medirse en la final a Víctor Carvajal, Daniel Carvajal y Sophia Rodríguez, quienes también se ganaron el boleto para pulsear ser junto a sus parejas, los mejores sobre la pista.
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El compañero de baile de Lucía Jiménez reconoció con humildad que logró llegar a la gran final no por ser un gran bailarín, sino por el apoyo que le ha dado el público con sus votos.
"Gracias al apoyo del público, porque el cariño que me han demostrado todos los costarricenses es impresionante. Estoy honestamente muy agradecido por su apoyo por eso es que llegamos a la final, solo por eso", señaló.
Mr. Fitz mencionó que tuvo que esperar 11 semanas para bailar bollywood, el ritmo que más le gusta, motivo por el que, según él, quizás se llevó la calificación perfecta por parte de los jueces y se aseguró un campo en la final.
Siguió el consejo de la mamá
Antes de iniciar la competencia de baile en canal 7, el exembajador era poco conocido en el país y poco a poco se fue dando a conocer por su gran carisma y simpatía.
Además, su situación familiar conmovió a muchos cuando contó que su madre falleció por un cáncer de mama y que su esposa, Andrea Haney, también está luchando contra esta enfermedad.
De hecho, el estadounidense decidió crear un fondo para apoyar a las personas que padecen este tipo de cáncer, con el dinero que le paga Teletica por su participación en el programa.
Para Mr. Fitz, el tratar de ser una persona humilde y no creerse más que nadie es lo que lo tiene hoy peleando por el trofeo de campeón de baile.
"Mi mamá, que falleció hace diez años, me decía siempre lo mismo: 'hay que tratar a la gente como usted quiere ser tratado, no importa su cargo', esa es una regla básica para la humanidad y a lo mejor la gente ha notado eso. Yo le tengo mucho cariño al público y al país y si ellos me devuelven un poco de ese cariño pues yo quedo más que feliz", dijo.
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De llegar a ganar la competencia, el exembajador le dedicará la entregará del trofeo a su esposa y a sus hijos, quienes lo han apoyado desde el momento que dijo sí al reto de aprender a bailar.
Cabe recordar que el ganador solo se llevará el trofeo para la casa, ya que hasta el momento la producción de Teletica no ha anunciado si le dará a la pareja ganador algún reconocimiento económico.