Rodrigo Alves es reconocido a nivel mundial por el gran número de cirugías plásticas a las que se ha sometido para lucir lo más parecido posible a un muñeco Ken y no pierde la oportunidad para presumir de estos resultados.
El brasileño recientemente asistió a una fiesta de Halloween en California, para la cual escogió un disfraz como caído del cielo.
Alves decidió representar un ángel, para lo cual vistió un pequeño tutú, las tradicionales alas, un halo y tenis. Otro elemento fundamental de su disfraz fue su impresionante abdomen.
Pero no se engañe, los cuadritos del hombre no son producto de un riguroso régimen de ejercicios y una alimentación balanceada.
Para obtener tal definición Alves desembolsó $19 mil con el fin de colocarse unos implantes de silicona.
Durante la celebración, el brasileño estuvo acompañado de Justin Jedlica, quien fue conocido del Ken humano muchísimo antes que Alves.
Los dos aficionados a la cirugía plástica presumieron sus cuerpos y las inversiones por miles de dólares que han realizado para poder verse así.
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