Modelo transexual quemó a jugadores chilenos

La selección chilena sigue en el ojo del huracán después de quedar fuera del Mundial de Rusia en la última fecha de la eliminatoria, a lo que se sumó las acusaciones de que los jugadores pasaban en una pura fiesta y que eso habría sido el causante del mal rendimiento.

Pero la cosa no ha terminado ya que la última polémica es con la modelo transexual Fabiana Portella, quien reveló que recibió una picante invitación por parte de dos jugadores chilenos, quienes incluso estarían casados.

Al parecer, esto se dio previo al enfrentamiento ante Brasil, en el partido decisivo que perdieron 3-0 y los fuera de la Copa de la Copa del Mundo.

Portella, quien lucha para hacerse un espacio en la televisión de su país, afirma que no está hablando paja ni quiere hacerse fama aprovechándose de la situación, sino que lo hace porque tiene pruebas en mano de lo que dice.

“Si vine acá es porque tengo pruebas. No hubiese venido a hacer el ridículo o inventar cosas. Tengo fotos, videos y audios de las conversaciones. Tengo la foto desnudo de un futbolista, no se le ve la cara, pero se escucha su voz y se ven sus tatuajes”, confesó para el programa de farándula Intrusos de ese país.

Fabiana confesó la situación porque siente mucha molestia por la eliminación chilena y le pareció una propuesta muy irresponsable dado la obligación que tenían los jugadores.

Además, la modelo aseguró que los futbolistas suelen buscar a chicas trans muy a menudo y que ella ha estado con otros en el pasado.

"Es que parten conociendo a modelos faranduleras. Tienen fiestitas con ellas y después vienen a conocer trans y comienzan a invitarnos para que llevemos a otras amigas. Yo no voy a dar nombres", dijo Portella quien conoce futbolistas desde 2008.

En Chile la cosa está que arde y las acusaciones vienen por todo lado. La que empezó fue Carla Pardo, la esposa del arquero y capitán Claudio Bravo, quien le tiró a otros jugadores al tratarlos de fiesteros y borrachos y que por eso se les fue el pase.

Arturo Vidal fue uno de los más atacados, a él lo tratan de fiestero y lo acusan de pagarle a la seguridad del hotel donde estaban hospedados para que borraran las cámaras de seguridad.

Las acusaciones de la mujer de Bravo cayeron como una patada a algunos de los futbolistas, quien le habrían respondido de la misma manera, que su esposo tampoco es un angelito.

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“Él no era un santo y su familia sale dando cátedras de ética, lo que no es aceptable. Las cosas quedan a lo interno, lo demás es una traición", enfatizó un jugador, según publica el diario El Mercurio, aunque no revela de quién se trata.

En Chile la eliminación al mundial causó problemas mucho más allá de lo deportivo.