Minutos antes de subirse al avión que lo llevará a Santa Cruz de la Sierra en Bolivia, sede del Club Blooming, Jeaustin Campos tuvo este martes por la tarde un toquecito para hablar con La Teja sobre su repentina salida del Cartaginés y la experiencia que lo espera en sudamérica.
Mientras que los blanquiazules presentaban a Javier Delgado como su nuevo entrenador, el oriundo de San Francisco de Dos Ríos en San José, jaló rumbo a su segunda experiencia internacional como entrenador, junto a su agente Adolfo Hernández.
En su equipaje no llevó mala vibra, resentimientos ni deudas y mucho menos la palabra fracaso, eso solo se quedó en la mente de quien quiera pensar de esa forma según comentó. Jeaustin afirma salir con la frente muy en alto del cuadro centenario aunque le quedó un sinsabor.
Campos no pudo clasificar al Cartaginés a la cuadrangular final en ninguno de los dos torneos que dirigió, lo cual fue sin duda su gran deuda con la afición brumosa. El entrenador afirma que él no vendió humo respecto a lo que podía conseguirse en el club con las condiciones dadas.
"El fracaso depende del punto de vista que se vea, la afición solo ve lo que está apenas por encima y la imagen. Creo que a mediano plazo se van a ver los frutos, yo nunca fui con el ánimo de ser campeón sí o sí, sino con la idea de crear un proyecto tan sólido que eso nos llevara a un campeonato", comentó Jeaustin.
El técnico afirma que cumplió en un 80% con los objetivos que le planteó a la directiva brumosa y que su salida se dio más que nada porque las condiciones en Cartago se pusieron muy rudas para continuar con el proyecto y no pintaba que fueran a cambiar.
"Unas no se dieron por falta de infraestructura, otras por la situación financiera del club que no mejoró y la otra que es claramente la parte del campeonato, pero tampoco podemos satanizar la situación, el equipo siempre jugó con personalidad, por un punto, por un gol, por un autogol, por un partido no todo es malo, obviamente la fanáticos siempre van a pensar así, pero lo respeto", indicó el que está a un paso de ser el entrenador del cuadro de La Academia, como es conocido el Blooming.
Para Campos el cambio de mentalidad que tuvo el equipo y derribar algunas rachas negativas son parte de los cosas con las que se queda, les dio un estilo diferente afirma.
A pulsearla
Sobre su nuevo equipo, a Jeaustin le espera mucho brete porque no pasa el mejor de los momentos, ocupa el quinto lugar de la liga boliviana con 25 puntos a 12 del líder, Bolivar.
El club perdió cinco de sus últimos siete partidos y en la parte económica también vive penurias, en diciembre del año pasado sus jugadores acudieron a la asociación de "Futbolistas Agremiados de Bolivia" (FABOL) para reclamar por pagos atrasados.
Campos sabe muy bien donde se está metiendo, tiene un acuerdo verbal y un precontrato firmado por 18 meses con posibilidad a un año más. Sería presentado este miércoles ante el público.
"Es una muy buena oportunidad, Sudámerica siempre es un mercado atractivo, tenemos posibilidad de jugar Copa Libertadores, Copa Sudamericana, es un buen peldaño para mi carrera en la parte profesional"
Campos también se encargaría de las ligas menores del club, lo que le ilusionó más del proyecto.
"Saben que hay una dualidad de funciones conmigo por lo que quieren montar una estructura de divisiones menores bien fuerte, que según palabras del presidente no están siendo bien aprovechadas por el club contando con instalaciones de primer nivel, es un proyecto a mediano plazo", destacó.
Blooming es un club que se fundó en 1946 y tiene cinco títulos en Bolivia, el último conseguido en el 2009. Juega en el estadio Tahuichi Aguilera con capacidad para 38 mil espectadores y su gran rival es el Oriente Petrolero, con quien juega el clásico cruceño.
Campos llega con la presión de buscar éxitos, luego de un paso gris con los brumosos.