Los tres años de proceso (de los de verdad) que lleva el técnico Johnny Chaves al frente del Santos está dando buen fruto, gracias a que armó un grupo que suda y juega por amor a la camiseta.
Los guapileños están volando en la Liga Concacaf, tres partidos disputados y tres victorias; ya eliminó al San Juan Jabloteh de Trinidad y Tobago y está a punto de dejar en el camino al Chorrillo FC de Panamá, pues ganó (1-0) en la ida y ahora los espera el próximo martes (8 p. m.) para liquidar la serie y avanzar a semifinales.
En el Torneo de Apertura también marchan sólidos los guapileños, son quintos en la tabla de posiciones, no han perdido en las tres fechas disputadas y acumulan cinco puntitos.
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Chaves buscó gente de sangre caribeña para su cuadro y logró reunir a 22 pupilos de la zona y solamente 6, del total de jugadores inscritos (Alejandro Gómez, Juan Diego Madrigal, Marvin Obando, José Garro, Diego Díaz, Kenny Cunningham) provienen fuera de esta región.
Figuras como el portero Bryan Morales y los jugadores Pablo Arboine, Rigoberto Jiménez, Osvaldo Rodríguez, Reimond Salas y Starling Matarrita, entre otros, fueron formados en las ligas menores del club.
Además, otros como Edder Monguio, Wílmer Azofeifa o Michael Barquero crecieron en otros equipos pero tienen sangre del Caribe y se adaptaron perfectamente a la idea del técnico.
Todos estos factores han hecho que el grupo por completo se comprometa con la institución y no hayan terminado el torneo pasado deseando jalar para otro club que los tentara.
"En lo personal estoy comprometido porque Santos me dio la oportunidad de alcanzar mi sueño de jugar en Primera División, quiero devolverle lo mucho que me ha dado, el grupo es una mezcla de experiencia y juventud, los jóvenes nos agarramos con los de experiencia y así jalar para el mismo saco", comentó el talentoso Azofeifa, de 23 años.
Y es que cuando parecía que el joven iba a dar el salto a un equipo grande en Tiquicia decidió quedarse en Guápiles y luchar. Incluso el técnico Chaves dice que él podría dar el salto al extranjero directamente desde el Santos.
"Estamos muy comprometido con nosotros mismos, con la institución, con Guápiles porque queremos hacer historia, hemos hecho buenos torneos pero tenemos el objetivo más alto, queremos ser campeones y trabajamos con humildad, cuerpo técnico y gerencia", destacó Wílmer quien creció en Cariari.
"Es un grupo en el que la mayoría nos conocemos. Reimond, Youstin (Salas), Osvaldo, entre otros, han jugado mucho tiempo juntos, hay mucha amistad, compañerismo y se siente el amor por estos colores, la mayoría hizo ligas menores y somos de la zona", agregó.
El habilidoso volante confiesa que un punto alto en el equipo es la dirigencia porque aún con las limitaciones pudo conservar la mayor parte del equipo para la temporada.
"Sabemos que es una institución pequeña con sus pro y contras porque el dinero es limitado, pero nos acomodamos a lo que tenemos, sabemos las limitaciones que hay pero eso no es impedimento para hacer historia y seguir mejorando porque si lo hacemos, tarde o temprano, la parte administrativa va a ir creciendo", enfatizó.
Zarandeadas exitosas.
El capi Monguio cree que la zarandeada para escoger el equipo ha sido clave para que queden los que de verdad están comprometidos.
"Creo que la escogencia de los elementos para este grupo ha sido muy selectiva, se han hecho muchos filtros para que calcen de la mejor manera, es mano de un entrenador y junta directiva que escogen las personas. Por ejemplo Garro, Cunningham, Obando, Diego Díaz, Adams y Lagos, son jugadores primero que todo ganadores, después Osvaldo y Dixon son de la casa, sienten la camisa y los que son de afuera han adquirido el compromiso por convencimiento porque e un grupo que vale la pena", comentó Edder.
"Es una institución responsable que lo que promete lo cumple, no da falsas cosas y lo que dijeron que iban a dar lo dan, hay una tranquilidad que pocas instituciones tienen, aparte de eso el torneo pasado hicimos historia, clasificando dos veces seguidas a cuadrangulares, después logramos la clasificación al torneo internacional, entonces se rompe el paradigma de que solo en otros equipos se consiguen cosas como las que hemos hecho", explicó.
"Tenemos confianza de que aquí en Santos podemos alcanzar las metas que tengamos, es cierto que uno quiere trascender, y llegar a equipos como Saprissa, la Liga y Herediano es valorado, pero el cariño hacia la institución pesa mucho en jugadores, es una casa a la que uno está contento de pertenecer", agregó.