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El mal arranque del Herediano en la cuadrangular final se podría deber a nada más y nada menos que la maldición del récord.
Este es un mal que ya vivió en carne propia Liga Deportiva Alajuelense en el campeonato de Invierno 2014 y que pudo haberse trasladado al camerino del Team este semestre.
Al igual que los rojiamarillos, la Liga en el 2014 iba volando, ganó la fase regular con impresionantes 53 puntos y aunque no fue con invicto como los florenses, sí le sacó 8 puntos de ventaja al segundo lugar que en esa ocasión fue el Team.
Ese equipo al mando de Óscar Ramírez fue el primero en la historia en superar la barrera de los 50 puntos, y eso que tenía un cuadro novato con jugadores que apenas arrancaban como Ronald Matarrita. El promedio de edad erizo era de 21 años.
Pero cuando más se esperaba de los rojinegros, apareció la maldición, en aquel entonces no se jugaba cuadrangular, se iba directo a semifinales y ahí se toparon a Saprissa, perdieron el primer juego 1-0 y empataron el segundo 1-1 quedando eliminados.
Ese año quedó campeón el Monstruo, quien clasificó en el cuarto lugar, era al que menos probabilidades se le veían y terminó derrotando a los heredianos en la gran final.
Sin duda, los florenses tienen síntomas de este mal y si Hernán Medford no encuentra una cura rápida podría costarles el título 27 en la historia del club.
La ventaja de los rojiamarillos es el nuevo sistema de juego, pues aún les quedan 4 partidos para reponerse en esta segunda ronda y levantar su rendimiento y si no les alcanza, todavía tienen dos juegos de la final para intentar levantar la Copa.
"Decirle a la afición que el grupo cuando ganamos o cuando estuvimos invictos durante 25 partidos no éramos los mejores y ahora no podemos ser los peores. Tenemos que motivarnos y levantar la cabeza, tenemos que ver que no hemos perdido nada todavía, faltan doce puntos en disputa y gracias a Dios tenemos una revancha el miércoles. El grupo es maduro y fuerte, y ahora es cuando tenemos que estar más fuertes y unidos", señaló Jairo Arrieta
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También habló el defensor Johnny Acosta, quien se perderá mínimo el juego de mitad de semana ante Santos en el Ebal Rodríguez porque salió expulsado este domingo ante Saprissa.
"Lamentablemente hemos tenido dos errores que nos han costado la pérdida en los dos partidos, matemáticamente todavía hay opción", dijo Acosta.
"Lo que hay que cambiar es mínimo, los partidos los perdimos por dos errores puntales, es un grupo bastante maduro, hay opción y mientras estén las opciones el equipo tiene el norte claro, tampoco podemos volvernos locos", agregó.
El próximo reto de los florenses será en el estadio Ebal Rodríguez de Guápiles, donde este miércoles (6:30 p.m.) visitarán al Santos en un duelo de vida o muerte para ambos clubes que andan pa'l tigre, y no necesariamente hablamos de la mascota del actual campeón nacional.
